Hoy unos consejitos para la elección de los zapatos de novia, que el sentido común siempre se tiene pero nunca esta demás que nos recuerden ciertas cosas a tener en cuenta. Ya se sabe que los nervios para el gran día a veces nos tiene la cabeza un poco loca...
- No estrenes los zapatos el mismo día de la boda. Pontelos en casa a ratos para que puedan ir diciendo por muy cómodos que los veas, todos sabemos lo que es estrenar zapatos. Seria una pena arruinar todo un look de novia por un caminar un tanto extraño...
- Llévalos a tus pruebas del vestido mínimo las 3 ultimas veces para que el vestido quede a la altura deseada seria terrible llevar un vestidazo arrastrando cuando no tenia que ser así, o corto como si te lo hubiesen prestado.
- Cuando compres los zapatos asegurase que sean de tu talla, por muy bonitos que sean, ni las hormas ni las plantillas solucionaran tu capricho ese día. Es muy arriesgado! Nuestro consejo es que te sientas cómoda con ellos, sin que te corten la circulación, ni tengas que ir chancleteando. Si sabes que tus pies a lo largo del día se hincharan prueba con medio numero mas pero solo eso.
- Si eres previsora puedes usar tiritas de gel en las zonas que ya sabes que te aprieta mas el zapato o te va a rozar, de tal manera cuando los pongas ya no podrán hacerte la temida rozadura al llevarlas puestas con antelación.
- A todas nos gustan los zapatos de ensueño, pero si tu propósito es poder utilizar esos zapatos en otras ocasiones, apuesta por lineas temporales y de corte sencillo. Colores neutros o tejidos que se puedan teñir. Actualmente la moda nupcial lo tiene muy en cuenta y casi todas acabamos con un zapato de locura y deseando volverlo a poner.
- Si eres poco fan de los tacones, intenta buscar un modelo que te dé altura sin tener que parecer un pato mareado, las plataformas ayudan a la estabilidad. Intenta practicar en casa para evitar momentos tensos en el gran día.
- No sin mis zapatos de cambio. Aunque estés acostumbrada a los tacones, el día y la noche acabaran pasando factura a tus pies. No olvides llevarte un zapato más cómodo para llegado el momento, cambiarte y seguir disfrutando de tu gran día.
¿Qué te han parecido estos consejitos? ¿Ya has elegido tus zapatos para el gran día?